FUNCIONES FISIOLÓGICAS Y ENERGÉTICAS DEL HÍGADO
Según la medicina tradicional china (MTC), el concepto de Órgano abarca tejidos, líquidos, órganos de los sentidos…, y la influencia a nivel emocional, psíquica y espiritual: el funcionamiento del Órgano afecta al estado emocional y psíquico; así como las emociones, pensamientos y estados espirituales afectan al equilibrio y funciones de los Órganos.
Por ello, desde el punto de vista del bienestar, son de gran ayuda los métodos para aquietar la mente y armonizar la energía y, de este modo, procurar un estado de equilibrio. “Más vale prevenir que curar”.
Los artículos que dedicaremos a las funciones fisiológicas y energéticas de los Órganos, los basaremos siguiendo la teoría de los Cinco Movimientos* de la MTC.
*En este blog, en la categoría de Medicina Tradicional China, tienes artículos sobre la teoría.
Funciones fisiológicas del hígado:
Drenaje, dispersión y almacenamiento:
– Distribuye el Qi y la Sangre de forma continua y fluida por todo el organismo.
– Estimula la digestión y asimilación de los alimentos, al favorecer los movimientos de ascenso y descenso del Bazo y el Estómago.
– Produce la bilis.
-Regula el volumen de la sangre en el cuerpo según la actividad muscular y las emociones.
– Regula las emociones.
– Nutre tendones y ojos.
Zonas corporales: Ojos, lágrimas, uñas, tendones.
Funciones energéticas del hígado:
Ascendente:
– Ayuda al Bazo a subir la energía (Qi) de los alimentos a los pulmones. Favorece el retorno de la sangre de las extremidades inferiores al tronco.
Difusión:
-Hace que el Qi de reunión (Zhong Qi: energía de los alimentos y del aire reunidos en el pecho) se distribuya continua y fluidamente por todo el organismo.
Descendente:
– Ayuda al estómago, a través de la vesícula biliar, a descender los alimentos por el tracto digestivo.
Función energética alterada: Estancamiento, debilidad y fuga hacia arriba.
La emoción que altera el Qi del Hígado es la ira, manifestada o reprimida, y todas sus variantes: frustración, irritabilidad, rabia, resentimiento…, haciendo que el Qi se estanque o ascienda y estalle imprevisiblemente.
DISFUNCIONES:
Irritabilidad, irascibilidad, depresión, preocupación, recelo, sospecha. Distensión y dolor en el pecho, hipocondrios, mamas, ingles. Falta de apetito eructos, vómitos, diarrea. Trastornos menstruales. Tumores ginecológicos. Dolor de cabeza y vértigo. Trastornos del sueño. Palidez. Visión borrosa, ojos secos, disminución nocturna de la vista, lagrimeo, miopía, estrabismo, conjuntivitis. Espasmos en tendones y músculos. Uñas quebradizas, descoloridas, sin brillo, secas, blandas, deformadas.
